Antiguo Egipto,¿cómo era el sexo en tiempos de faraones?
Hay muchas civilizaciones que nos siguen fascinando incluso siglos o milenios después de desaparecer, tal vez porque queremos entenderlas mejor para saber cómo hemos evolucionado desde aquella época hasta la actual, y ser capaces de encontrar las diferencias, pero también las similitudes, que hay entre nosotros y ellos. Una de las más especiales, de las que más pasión provoca entre los amantes de la historia, es sin duda el Antiguo Egipto, en la época de mayor esplendor, la de los grandes faraones. Sin lugar a dudas, Egipto tuvo una de las civilizaciones más sorprendentes, brillantes e interesantes que han poblado este planeta, y no es casual que haya incluso carreras dedicadas por entero a estudiarlas, como la Egiptología.
Mucho se ha hablado sobre los ritos funerarios, la cultura y los mitos con los que contaba esta civilización, pero de lo que no se ha hablado tanto es de su manera de entender el sexo y la pasión. Algo que es tan crucial para cualquier cultura, y que en la Antigua Grecia y Roma si que ha tenido un peso capital, en Egipto parece haber quedado algo más disimulado. Sin embargo, se conocen muchas delas características de esta civilización en cuando al sexo, ya sea a través de grabados de la época o de historias que nos han llegado a través de todos estos siglos. Desde los faraones hasta los vasallos, el sexo tenía muchísima importancia en aquella cultura, y aquí vamos a estudiar un poco más a fondo esa influencia, para entenderla mejor.
La sexualidad en los antiguos grabados egipcios
Una de las muestra de cómo la sexualidad se entendía en aquella época nos llega a través de los tratados. Es curioso entender que el matrimonio tal y como lo conocemos actualmente no existía en el Antiguo Egipto. Las parejas se consideraban “casadas” en el momento en el que se iban a vivir juntos. Eso sí, a veces había papeles de por medio, como algunos contratos en los que ambos se comprometían con sus deberes y derechos tanto como pareja como futuros padres. Todo muy bien explicado a través de grabados y papiros, formando familias que podían llegar a ser muy numerosas. La sexualidad también se muestra de manera explícita en algunos de estos grabados, si bien era algo que pertenecía a la parcela íntima de cada pareja.
El sexo era tremendamente importante en esta época en el sentido de ser la principal razón para casarse con alguien. Más que el sexo, la función reproductiva en sí, el poder traer descendencia a este mundo con una buena pareja. De hecho, la infertilidad se consideraba casi como una maldición y era motivo de divorcio, o más bien de separación de la pareja. En cuanto al sexo prematrimonial, no se ponía tanto énfasis en llegar virgen a ese momento de la vida, y de hecho las mujeres podían haber tenido relaciones previas, y no era algo que las avergonzara o impidiera que otros se casaran con ellas. Esto es más una idea impuesta por la tradición judeocristiana.
El papel de las mujeres en el antiguo egipto
El papel de la mujer dentro de la tradición sexual egipcia era indispensable, y no solo como en otras religiones, donde muchas tienen un papel secundario, sino siendo también partícipes de cada paso que la pareja debía dar. Por ejemplo, encontramos a mujeres de clase alta que podían escoger a sus maridos, y también a esposas que podían divorciarse de sus esposos si ellos incluían lo pactado al irse a vivir juntos. Ellas se casaban muy jóvenes, con apenas 14 o 15 años, y su misión dentro del matrimonio se basaba sobre todo en darle descendencia a su marido. En caso de que no lo pudiera hacer, se le permitía al esposo buscarse una segunda mujer, y de hecho, la poligamia estaba permitida, aunque no era tan popular porque en una situación así, el marido sencillamente buscaba divorciarse y punto.
La prostitución y la homosexualidad
La homosexualidad parecía no estar demasiado bien vista en Egipto, o al menos no era algo que estuviera totalmente normalizado, aunque es cierto que tampoco hay muestras de condenas por sodomización, por ejemplo, o actitudes lascivas, algo que sí llegó más tarde en otras civilizaciones. Es seguro que había homosexuales en el Antiguo Egipto, aunque es muy probable que solo lo fueran de puertas para adentro, porque como decimos, la situación no estaba tan normalizada. Hay más resquicios de homosexualidad entre hombros que entre mujeres, algo que también es habitual ya que el lesbianismo parece haber sido ignorado a lo largo de toda la historia.
En cuanto a la prostitución, era algo también común, y así podemos encontrar representaciones en papiros y grabados, donde las prostitutas aparecen con símbolos eróticos como pelucas y en actitudes más lascivas. Aquí hay que discernir entre las mujeres que se dedicaban “libremente” al arte de la seducción y la satisfacción de los hombres, y las que, como esclavas, debían cumplir los deseos sexuales de sus amos, algo que también era bastante habitual en la época. Desde luego, la sexualidad en este sentido era mucho más recatada en Egipto que en la Antigua Grecia, por ejemplo, al menos a la hora de transmitirla a través de esos medios que nos han llegado hasta nuestros días.
Cleopatra se ha convertido en un auténtico mito sexual
Uno de los mitos más sonados del Antiguo Egipto era la legendaria capacidad de seducción que poseía Cleopatra, seguramente una de las figuras más importantes de esta civilización. Si bien se cuenta que la mujer no era excesivamente hermosa, su poder de seducción le permitió llegar mucho más lejos, sobre todo en su relación con Julio César, el comandante romano que cayó rendido ante sus encantos y permitió que Egipto viviera con tranquilidad en una época en la que todos estaban temerosos precisamente del Imperio gobernado por el amante de Cleopatra. Sus artes de seducción, su capacidad para hacer que cualquiera cayese rendido ante ella, la han convertido en todo un mito sexual.